Sony está enfrentando una demanda colectiva de $7.9 mil millones por supuestos cobros excesivos en su tienda digital, la PlayStation Store, por la venta de juegos y contenido extra digitales.Esta demanda es parte de un debate más amplio sobre las tiendas digitales y las tarifas de comisión cobradas por empresas como Apple y Sony.
A pesar de los esfuerzos de Sony por desechar el caso, la demanda ha sido autorizada para seguir adelante y podría costarle a Sony miles de millones. Los abogados de Sony esperaban que la masiva demanda contra PlayStation por supuestamente cobrar en exceso a los clientes fuera desestimada. La demanda inicial proviene de los términos y condiciones de PlayStation para desarrolladores y editores que venden juegos en la tienda digital. Con la comisión del 30% que Sony cobra por los juegos vendidos en la PlayStation Store, se alega que la compañía termina cobrando a los consumidores un precio demasiado alto por los títulos digitales.
La lucha contra este tipo de comportamiento en las tiendas digitales no es nueva, ya que recientemente Apple enfrentó demandas debido a su recorte del 30% en la App Store. De hecho, este es el principal debate dentro de la demanda de Epic contra Apple y Google, que aún está en curso en el caso de Epic y Google. Esta vez, sin embargo, no son los editores de juegos los que demandan, sino los consumidores. Después de más de un año, parece que esta demanda continuará y podría costarle a Sony miles de millones de dólares.
Reuters informa que un tribunal de Londres ha permitido que siga adelante una demanda colectiva presentada contra Sony Interactive Entertainment. Se alega que Sony está «abusando de su posición dominante» al requerir que el software se compre y venda solo en su mercado en línea. Debido a la comisión del 30% que Sony cobra en todas las ventas de la PlayStation Store, se argumenta que los consumidores se ven obligados a pagar un precio más alto por el entretenimiento de lo que deberían.
Aunque la demanda ha sido autorizada para continuar, lo hace sin la participación de las personas que realizaron compras en la PlayStation Store desde que se presentó el caso en 2022. Nuevamente, los abogados de Sony han intentado que el caso sea desestimado por completo, argumentando que era «defectuoso desde el principio». Sin embargo, no ha tenido éxito y el caso ha sido autorizado para seguir adelante.
Irónicamente, Sony se opuso a la adquisición de Activision Blizzard por parte de Microsoft, alegando que era anti-consumidor. Gran parte del debate se centró en una de las nuevas franquicias más grandes de Xbox, Call of Duty. Sony ha tenido históricamente acuerdos de exclusividad con la popular serie de juegos de disparos, y la reciente adquisición buscaría poner fin a eso.